Disminuyen pacientes hospitalizados por COVID en Yucatán

Las muertes causadas por COVID-19 aumentaron un 9 por ciento en el mundo en la última semana, lo que confirma que el fuerte incremento de nuevos casos que ha provocado la variante ómicron ya empieza a reflejarse en la mortalidad, según datos divulgados este miércoles por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Las muertes por Coronavirus se elevaron a 59 mil a nivel global y los nuevos casos diagnosticados totalizaron los 22 millones en la última semana, de acuerdo con el informe epidemiológico que la OMS publica cada siete días.

Los casos totales desde que empezó la pandemia hace dos años han superado los 370 millones, mientras que las muertes reportadas son 5.6 millones.

El número semanal de decesos por el COVID-19 progresó notablemente en el sudeste de Asia, en particular en India, con un aumento del 41 por ciento frente a la semana anterior, seguido de la región del Mediterráneo oriental (32 por ciento) y América (16 por ciento).

África fue la única región que reportó una reducción de muertes (7 por ciento), mientras que la incidencia de decesos se mantuvo a los mismos niveles que la semana anterior en Europa y el Pacífico Occidental, que incluye a China y otros países de Asia, como Vietnam y Camboya, además de Australia.

Por países, las cifras más elevadas de muertes corresponden a Estados Unidos, India, Rusia, Brasil e Italia.

Por otra parte, el informe epidemiológico revela que de acuerdo con el resultado de las secuenciaciones genéticas realizadas en los treinta últimos días y que ahora se encuentran en la base de datos de referencia, la variante ómicron ya representa el 93.3 por ciento de todas las muestras recolectadas y se encuentra en al menos 57 países.

La variante delta, predominante hasta hace pocas semanas, representa ahora solo el 6.7 por ciento de los casos confirmados.